Paso Uno. Por favor ten una buena idea ¿quieres?
Deja de ponerte objetivos como «quiero adelgazar». ¿Qué significa ese objetivo después de todo? Tal vez sea tanto el sobrepeso que saltas y terminas agotado, o tal vez solo tengas que bajar cinco kilos. ¿Cómo sabes que has logrado tu objetivo si ni siquiera sabes cuándo lo lograrás? Tómate unas medidas, pésate, saca tu porcentaje de grasa corporal y tu masa corporal. Luego con esos datos ponte un objetivo realista de no más de un kilo por semana.
Paso Dos. Sal de tu zona de confort
Si estás haciendo algo por un buen tiempo y no pasa nada entonces eso que estás haciendo es como mínimo obsoleto para ti. Tienes que salirte de esa zona de comodidad y dar lo mejor de ti, realmente tienes que esforzarte. Recibo muchas preguntas del estilo «hace dos años que hago la misma rutina y mi barriga crece y crece». ¡Claro que lo hará! Hay que esforzarse, es casi seguro que tu cuerpo se haya adaptado a la rutina y esta ya no devuelva resultados. El cuerpo humano necesita cambios constantes y estímulo. Así que sacúdete un poco, sácate la modorra y comienza a entrenar poniendo esfuerzo en ello ¿si?
Paso Tres. Fotos de antes y después.
Se lo digo a todos mis clientes. Que se saquen una foto hoy y la otra dentro de tres meses. Porque si entrenas como te digo, con esfuerzo y constancia la foto del «después» reflejará otro cuerpo distinto. Créeme. Si te ejercitas duro sentirás los cambios, tus amigos, tu pareja te lo hará saber, pero no hay mejor recompensa que comparar dos fotos y ver todo lo que has logrado. Además esa es una gran manera de seguir motivado.
Paso Cuatro. Come para vivir y no al revés.
A todos nos gusta comer y queremos hacerlo todo el tiempo. Queremos lo que vemos y queremos mucho de eso. Sin embargo esa no es la mejor manera de comer ya que usualmente uno no está educado a comer y lo que quiere a menudo es comida chatarra, comida sin nutrientes y repleta de calorías. O sea, si quieres verte más delgado hay que comer lo que hay que comer, que no es comida chatarra por supuesto. Acostúmbrate a comer para suministrarle combustible a tu cuerpo, para proveerle energía. La comida es energía, y la comida sana es muy rica, solamente hay que buscar alternativas que te agraden. Pero que el sabor de la comida no sea tu principal punto de vista, come para vivir, para ser más rápido/a, más fuerte, más sano/a.
Paso Cinco. Sé dedicado/a.
Sé constante, hazlo todos los días. Vamos, sabes lo que tienes que hacer, hay que comer sano, hay que hacer ejercicio, hay que dormir bien. No hay que ser perfecto, pero sí constante y dedicado/a con tus hábitos. Hay que desarrollar hábitos para lograrlo, y es tu entera responsabilidad hacerlo. Te lo debes, se lo debes a tu salud, a tus hijos a tus seres queridos, te debes respeto y eso incluye cuidar tu cuerpo. Prepara con anticipación, planifica y reduce las posibilidades de caer en la tentación.
Tu Cuerpo Ideal | Cómo adelgazar para siempre