Todos sabemos que el ejercicio es una parte esencial para nuestra salud y una vida equilibrada, sin embargo a veces sentimos que el ejercicio es más una tortura que algo que hagamos y podamos disfrutar. Cuando somos adultos tratamos al ejercicio como algo que debemos hacer en vez de algo que nos gusta. Cuando elegimos un ejercicio lo hacemos basados en lo que todos los demás están haciendo o qué se considera sano, bueno y popular, pero no le dejamos mucho espacio a lo que nos agrada, incluso a veces se abandona antes de comenzar por el prejuicio de que no se está hecho para los deportes o que no se tiene el tiempo para hacerlo.
La clave está en encontrar lo que funciona para ti. Puede que hacerlo signifique probar varias cosas y hasta decepcionarte con algunas hasta que des con lo que te gusta. No hay un ejercicio que sea para todo el mundo, pero sí hay cientos de ejercicios para elegir de los que puedes enamorarte. Para lograrlo primero tienes que hacerte unas cuantas preguntas que te permitirán elegir libremente cuál es el mejor ejercicio para ti. Veamos…
¿Por qué quieres ejercitarte?
– Para perder peso, necesitas concentrarte en los ejercicios de cardio
– Para estar más fuerte y con mejor forma, principalmente necesitarás un entrenamiento de resistencia
– Para estar más sano, necesitarás una combinación de cardio, fuerza y flexibilidad en tu entrenamiento.
Ten en mente que sin importar cuál es tu objetivo todavía necesitarás incorporar los tres tipos de ejercicios en tu rutina y en cierta medida: cardio, fuerza y flexibilidad. Esto es esencial si quieres mejorar constantemente la manera en que te ves y te sientes.
¿Cuál es tu estado físico?
– Principiante. Nunca antes te has ejercitado o ha pasado mucho tiempo desde que lo hiciste por última vez. No intentes ejercicios avanzados ni tampoco hagas un esfuerzo descomunal porque te decepcionarás, te dolerá todo y probablemente abandonarás a la semana. Comienza lento y con actividades de bajo impacto como caminar, nadar, hacer ciclismo, pesas; y luego progresa a una intensidad más alta.
– Intermedio. Te ejercitas ocasionalmente. Prueba todo lo que quieras, pero mantente en niveles razonables de intensidad.
– Estás recuperándote de una lesión o tienes problemas de salud. Tu doctor será tu principal fuente de información sobre qué ejercicios puedes y no puedes hacer.
– Avanzado. Probablemente no estés leyendo esto, elige la actividad que más te guste.
¿Cuánto tiempo tienes disponible para ejercitarte cada semana?
– Si estás muy ocupado, increíblemente ocupado, entonces es momento de repensar tus horarios y agenda y encontrar tiempo para el ejercicio. Algo tiene que ceder para que entre el ejercicio. Encuentra esa media hora, una hora diaria para hacer ejercicio. Sé creativo y honesto: probablemente lo que te falte sean ganas y no tiempo.
– Si tienes todo el tiempo disponible encuentra el momento del día en que tengas más energía y ponte en movimiento.
¿Eres sociable?
– No. Entonces correr, caminar, ciclismo, entrenar en casa, con un entrenador personal, nadar son algunas actividades que disfrutarás.
– Sí lo soy. Puedes practicar algún deporte de equipo como el voley, basquet, fútbol, artes marciales, puedes tomar clases de aeróbics (hay cientos de estilos y opciones disponibles).
¿Y tus emociones?
– Las personas emocionales tenderán a disfrutar actividades como la danza, los deportes en equipo, mountain bika y programas de fitnes grupal.
– Personas más reservadas apreciarán más programas como el yoga, tai chi, pesas, máquinas de cardio o caminar.
¿Qué tan competitivo/a eres?
– Para algunos la competencia es su principal y único estímulo para hacer ejercicio. Para ellos un campeonato de fútbol, maratones 5k o 10k, triatlones, competencias de fitness o culturismo, artes marciales son algunas de las actividades que pueden funcionar mejor.
– Otros prefieren ejercitarse a su propio ritmo o simplemente sacarse la presión de la competencia de encima. Para ellos las actividades pueden ser las mismas, simplemente se trata del enfoque que se le de a la actividad. No es lo mismo salir a correr durante una hora con tu música favorita en el ipod que prepararte para una maratón de 42 kilómetros.
Por último también puede que necesites considerar qué tan agresivo eres (o no), cuánto apoyo necesitas, las actividades disponibles en donde vives y tus posibilidades de acceso a ellas, etc. Es bueno tomarse un pequeño tiempo de prueba y de reflexión sobre las actividades que quieres hacer y determinar cuáles disfrutarás más.
Espero que estas preguntas te permitan encontrar una rutina de ejercicios que se ajuste a tu persona, y que descubras el ejercicio que te además de ponerte sano o sana te permita disfrutar de la actividad.