Acompañando algunas carnes o pescados, en tortillas, salsas o en ensaladas, la arveja es uno de esos alimentos que tienen que estar todas las semanas en tu comida. Son llenadoras, saben bien en combinación con muchas comidas y además obtienes una nutrición fantástica. Mira todo lo que tienen para darte…
– Las arvejas son una de las legumbres más nutritivas que existen, repletas de fitonutrientes, minerales, vitaminas y antioxidantes.
– 100 gramos de arvejas contienen solo 80 calorías.
– Contienen una buena cantidad de fibra soluble y no soluble.
– No contiene colesterol
– Son una gran fuente de ácido fólico. Una porción de 100 gramos contiene el 16% de las dosis diarias recomedadas. Embarazadas, coman más arvejas.
– Cien gramos de arvejas contienen aproximadamente el 65% de los requerimientos diarios de vitamina C. Los alimentos ricos en vitamina C ayudan al cuerpo a desarrollar resistencia contra agentes infecciosos y combaten los radicales libres.
– Las arvejas contienen fitoesteroles, y los alimentos basados en plantas ricos en fitoesteroles han demostrado contribuir enormemente a reducir el colesterol malo.
– Contienen vitamina K. Aproximadamente el 20% de lo que necesitas cada día se encuentra en una porción de cien gramos de arvejas. ¿Para qué es buena la vitamina K? Entre otras cosas para fortalecer los huesos y combatir el Alzheimer limitando el daño neuronal en el cerebro.
– Su alto contenido de vitamina A (25% del diario en 100 gramos) ayuda a mantener la piel y las membranas mucosas en buen estado de salud, además de la vista.
También están repletas con buenas cantidades de antioxidantes flavonoides como los carotenos, luteína, y zeaxantina, todos buenos para combatir radicales libres y mejorar tu salud al comer arvejas regularmente. ¿Quieres más? Contienen buenas cantidades de vitaminas del grupo B (ácido pantoténico, niacina, tiamina, piridoxina), son buena fuente de calcio, hierro, cobre, zinc y manganeso.
Consejos para servirlas
Combinan bien con otras verduras como las papas, zanahorias, cebolla, remolachas para prepararlas en gran variedad de platos.
La sopa de arvejas o la sopa crema de arvejas es un plato delicioso, ideal para una cena o como colación en invierno.
Dos huevos batidos, arvejas previamente hervidas, ajo picado y un ligero toque de ají hacen una excelente comida.
Acompaña un pescado a la plancha con algunas hojas verdes y un puré de batatas junto a 100 gramos de arvejas hervidas.
Incluso un pote de arvejas hervidas con algún queso derretido, sal y pimienta hacen una comida altamente nutritiva y completa.
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