Recuperar tus músculos es clave en cualquier rutina de ejercicios que sigas y para cualquier objetivo que tengas.
Para desarrollar tu cuerpo y mejorar tu desempeño atlético, que te entrenes a gran intensidad es un paso importante. Pero de la misma manera también es clave que le dediques a tus músculos el tiempo para recuperarse, algo que la mayoría de las veces se subestima.
Los músculos sufren daños con cualquier entrenamiento, en especial con el ejercicio intenso. El descanso no sólo que es necesario para que esos músculos trabajados se recuperen, sino que también lo es para estimular su crecimiento.
La recuperación de tus músculos empieza al instante mismo de la rotura de fibras y sucede a nivel celular, es algo que pasa incluso cuando te estás ejercitando. Ahora sacando los tecnicismos de lado, el proceso puede llevar entre dos, tres y hasta siete días dependiendo de la intensidad con que los hayas estimulado.
Pero no te asustes, que lleve ese tiempo no quiere decir que tienes que esperar una semana para trabajar el mismo grupo muscular. Lo que podemos decirte es que el tiempo de descanso que tienes que darle dependerá de la rutina utilizada y de la intensidad con que la hagas. Dicho esto y como regla general puedes volver a ejercitar los músculos nuevamente a las 48 horas en rutinas de cuerpo entero, o bien entre tres y cinco días dependiendo de la cantidad de ejercicios que hagas de la división de tu rutina.
Hay evidencia cientifica que sostiene que la recuperación puede suceder incluso 36-48 horas luego de entrenar y por eso puedes entrenarte tan periodicamente como es el caso de rutinas full body o rutinas de culturismo HST de hipertrofia.
Otra pregunta que surge después de estos números es si se puede ejercitar otros músculos sin interrumpir el proceso de recuperación de los que ya se han entrenado…
La respuesta es si, si es que los músculos que están en reposo no asisten directamente a los que estás ejercitando.
Así, puedes implementar rutinas que no se interpongan en la recuperación de otros músculaos como podría ser utilizando rutinas divididas en las que se entrenan partes separadas del cuerpo en intervalos que no interrumpan el proceso de recuperación muscular.
Como sea, siempre ten presente que el descanso es parte del entrenamiento, y que si quieres aprovechar el máximo de estimulación entonces tienes que considerar el desanso como variable, cuidando de no excederte en esos tiempos según tu rutina, ni tampoco en sobreentrenarte ya que ambos extremos son contraproducentes.